miércoles, 21 de diciembre de 2016

A LOS QUE QUIEREN ESTAR BAJO LA LEY

"Decidme, los que queréis estar bajo la ley: ¿no habéis oído la ley? Porque está escrito que Abraham tuvo dos hijos; uno de la esclava, el otro de la libre.  Pero el de la esclava nació según la carne; mas el de la libre, por la promesa. Lo cual es una alegoría, pues estas mujeres son los dos pactos; el uno proviene del monte Sinaí, el cual da hijos para esclavitud; éste es Agar. Porque Agar es el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, pues ésta, junto con sus hijos, está en esclavitud. Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre. Porque está escrito: Regocíjate, oh estéril, tú que no das a luz; Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de parto; Porque más son los hijos de la desolada, que de la que tiene marido.  Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa. Pero como entonces el que había nacido según la carne perseguía al que había nacido según el Espíritu, así también ahora. Mas ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo, porque no heredará el hijo de la esclava con el hijo de la libre.  De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre."
Gálatas 4:21‭-‬31 RVR1960

¿Puede ser posible que halla creyentes que quieran estar bajo la ley? Algunos judíos convertidos al cristianismo enseñaban a los Gálatas, que era necesario que practicasen ciertas leyes establecidas por Moisés, si es que querían tener la bendición y salvación de Dios.

Hoy curiosamente, son algunos creyentes gentiles de occidente los que procuran convertirse al judaísmo, por que no creen que sea suficiente la salvación por la fe en Jesucristo. La fe sustituida por el temor y la inseguridad lleva a muchos a tratar de afianzarse en su salvación por medio de la observación de la ley. Parece que muchos creyentes no saben como administrar su libertad en Cristo y se sienten incomodos e inseguros, prefiriendo estar en esclavitud bajo leyes religiosas y normas de hombres.
Al parecer resulta más fácil, menos arriesgado y comprometedor seguir unas cuantas leyes y normas religiosas impuestas, que vivir por fe.

Sin duda alguna creo que el pueblo de Israel fue escogido por Dios para dar testimonio a todas las naciones del mundo y mostrar sus propositos para toda la humanidad. Creo que debemos estar agradecidos a Dios por su elección de ésta nación, sabiendo que de ella vino la salvación para toda la humanidad por medio del Mesías nuestro Señor.

Hoy día muchos creyentes se preocupan por averiguar si su apellido es de origen o descencencia judía. Algunos piensan que estar vinculados a la nación judía les aportará algún beneficio o bendición extra que no está incluida en la salvación por medio de Jesucristo. Nada está más lejos de la verdad.

Debemos amar y apreciar al pueblo de Israel, y debemos respetar sus costumbres y cultura. Aceptar el legado de las Escrituras y el evangelio de Jesucristo que hemos recibido a través de este pueblo departe de Dios es como mejor podemos honrarles.

No obstante, como cristianos no es necesario que practiquemos su cultura, costumbres ni rituales religiosos. La bendición de Dios es completa por medio de Jesucristo para todos los creyentes, no hay nada más que añadir.

Somos hijos de Dios por medio de la fe en Jesucristo, hijos de Abraham e hijos de la promesa. Somos ciudadanos de pleno derecho de la Jerusalen celestial, la nación libre. Los creyentes en Jesucristo somos judíos de pleno derecho por la fe.

"Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne; sino que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios."
Romanos 2:28‭-‬29 RVR1960

"pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa."
Gálatas 3:26‭-‬29 RVR1960

Se corre el peligro en la actualidad entre el pueblo evangélico de volver a prácticas y ritos judíos, que nada tienen que ver con la fe del evangelio de Jesucristo. Como en tiempos del apóstol Pablo, hoy también existen los judaizantes que predican la necesidad de practicar la ley, guardar las fiestas, y observar ciertos mandamientos en cuanto alimentos y purificación del cuerpo, con el fin de asegurar la salvación. Nada de todo eso tiene que ver con el nuevo pacto hecho por Jesucristo, firmado con su sangre en la cruz y ratificado por Dios en la resurrección.

La cosa raya la idolatría y la superstición cuando se piensa que una bandera del estado de Israel,  un símbolo como un candelabro o cualquier otro objeto que represente la cultura judía va añadir un valor espiritual extra o una unción especial al culto cristiano.

 "Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren."
S.Juan 4:24 RVR1960

La adoración verdadera a Dios es en espíritu, necesidad y requisito tanto para los gentiles como para el pueblo judío.

"porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre."
Efesios 2:18 RVR1960

No hay un acceso a Dios diferente para cada pueblo, sólo hay un Dios y sólo un camino. Pero además, sólo hay un pueblo en Cristo formado por gentiles y por judíos.
Entendamos que la identidad nacional no es ningún requisito para acceder con más facilidad a Dios u obtener mejores bendiciones, lo siento por todos aquellos que lo hayan creído.

 "Ya no hay judío ni griego;...."

martes, 13 de diciembre de 2016

UNA ADVERTENCIA A LOS CREYENTES

De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído.
Gá. 5:4 RVR1960

Hay algo más desastroso y peligroso que caer en un determinado pecado o debilidad de la carne. Aún existe esperanza para los que están perdidos y viven bajo el poder del pecado e influencia del mundo, sean creyentes o incrédulos. Sin embargo la situación se complica para todos aquellos que rechazan la gracia de Dios provista por medio de Jesucristo.

La advertencia del apóstol es contra el peligro a caer de la gracia, es decir, a perder practicamente toda esperanza de salvación. Los que se precipitan de la gracia y se alejan de ella, se separan de Cristo y de una vida de fe. El asunto es muy grave, puesto que la vida cristiana depende totalmente de la unión del creyente con Cristo.
La ley al no ser de fe apela al esfuerzo humano con el propósito de que el hombre agrade a Dios por sí mismo.

Desligar del griego katargéo, estar (dejar) enteramente inmóvil (inútil), inutilizar, invalidar, abolir, deshacer, suprimir, acabar, dejar.

La rae: Desligar
1. Desatar, soltar las ligaduras.
2. Separar, independizar.

Centrar la vida cristiana en las obras, en la observancia del antiguo pacto e incluso en nuestras normas religiosas eclesiásticas nos hace independientes de Cristo. Los creyentes de Galacia que sin lugar a dudas habían tenido una experiencia espiritual autentica se extraviaron de la fe a una vida cristiana en la carne.

Esto sólo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe? ¿Tan necios sois? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por la carne?
Gálatas 3:2‭-‬3 RVR1960

Cuando el creyente se desvía de la gracia o cae de ella queda inutilizado por completo para una vida espiritual cristiana, dicho de otra manera, se ha extraviado de la fe, ha perdido la fe y por tanto su poder espiritual.

Es interesante conocer el sentido de caído=caer, del griego ekpipto, ser sacado del curso de uno( en nuestro caso ser sacado de Cristo), llegar a ser ineficiente, dejar de ser, fallar.

El estancamiento espiritual o inmobilidad proviene de un apartarnos de la obra de la gracia por medio de Jesucristo hacia nuestros propios recursos naturales y humanos. El no crecer y avanzar en todo lo que representa la obra de Dios sucede cuando nos separamos de la gracia de nuestro Señor Jesucristo y nos independizamos de Él.

lunes, 5 de diciembre de 2016

A LOS QUE HAN ABANDONADO LA FE DEL EVANGELIO

Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad? Esta persuasión no procede de aquel que os llama. Un poco de levadura leuda toda la masa.  Yo confío respecto de vosotros en el Señor, que no pensaréis de otro modo; mas el que os perturba llevará la sentencia, quienquiera que sea.
Gá. 5:7‭-‬10 RVR1960

Este pasaje me lleva a pensar en multitud de creyentes que se han desviado de la verdad del evangelio y se han apartado de la fe por causa del mal ejemplo y falsas doctrinas de dirigentes eclesiásticos.

He visto a muchísimos cristianos que corrían bien e incluso a algunos con los que he hecho junto a ellos un buen trecho del camino que abandonaron la carrera. Otros continuan entre el pelotón de multitud de creyentes, y siguen por inercia la avalancha de gente religiosa seguidoras de alguna denominación o predicador carismático.

Un gran numero de creyentes no quieren saber nada de la iglesia por las malas experiencias que han tenido con las congregaciones donde han pertenecido. Comprendo a todos estos, y me duele, y creo que se de lo que hablo, pues yo mismo he tenido experiencias religiosas decepcionantes con el liderazgo religioso.

El cristiano que desea permanecer en la carrera hasta llegar a la meta debe entender que la apostasía que traerían los falsos ministros religiosos, así como la injusticia, los abusos etc. está todo predicho en las escrituras. Falsos apóstoles,  falsos profetas, falsos maestros, doctrinas de hombres, abundante filosofía, control religioso, abusos, falsa prosperidad, son cosas que no deberían de sorprendernos.

Es muy importante que los creyentes aprendamos a reflexionar y desarrollar un criterio según la verdad y justicia del evangelio. Hay una verdad de la cual cada uno en particular es responsable ante Dios y no debería permitir que nadie le manipule para que renuncie a ella. Es la importancia y valor de su individualidad y relación personal con Dios, es su libertad de elección y la responsabilidad que ello conlleva.

Los creyentes se exponen continuamente a ser manipulados y abusados porque rehúsan a tomar las riendas de sus propias vidas; les resulta mas cómodo que el lider de turno decida por ellos. De eso la mayoría somos culpables en mayor o menor grado. Es necesario que los creyentes espabilen y entiendan que solo necesitan estar bajo el gobierno de Dios y el señorío de Jesucristo sin necesidad de sujetarse a doctrinas de hombres ni lideres 'ungidos', ni sistemas eclesiásticos con trazos legalistas y manipuladores.