miércoles, 6 de marzo de 2013

LOS SABIOS AMIGOS DE JOB

JOB 42:1-6 RVR60 "Respondió Job a Jehová, y dijo: Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti. ¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Por tanto, yo hablaba lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía. Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás. De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven. Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza."

Es harto dificil llegar al corazón de la persona que sufre para consolarla cuando su aflicción es similar a la de Job. Los amigos que lo visitaron y estuvieron con él varios dias, ni aun con toda la sabiduría que desplegaron calmaron un poquito su dolor. Es más, lo que consiguieron fue agrabarlo. Ellos estaban convencidos de que Job había pecado, y por esa razón sufría todas esas perdidas y desgracias personales. Aquí se aplica perfectamente aquel refrán que dice: " Que Dios me guarde de mis amigos, que de mis enemigos ya lo haré yo." Esos sabios del pueblo no podían concebir que tal sufrimiento no se debiera a la injusticia cometida por Job. Pensaban, según su paradigma, que Dios lo estaba castigando y dandole su merecido. Claro que para nosotros que leemos el libro de Job y conocemos el principio y fin de la historia, es facil decir lo equivocados que estaban los amigos de Job. Yo les digo que si un grupo de predicadores de hoy, maestros, teólogos o eruditos bíblicos estuviera allí, cometerían el mismo error. Para todo el que conoce bien la ley de Dios, el paradigma inevitable y del que ninguno puede sustraerse es, el dolor, la miseria, el sufrimiento y la enferdad es causa del pecado. Además con esa actitud y manera de pensar creemos que justificamos a Dios. Bueno, somos los paladines de Dios, los defensores de la verdad ¡muerte al pecador!

Diariamente se comete este grave error con muchisimas personas, no queremos dañarlas pero lo hacemos; mas que consolar, fortalecer su fe y alentar su esperanza, las hundimos y pisamos un poquito más. Les sentamos en una silla y proyectamos sobre sus ojos el foco de la verdad con toda su intensidad, las interrogamos y le soltamos máximas hasta que confiesen sus pecados, o indagamos en su pasado hasta encontrar una fisura donde meter nuestra palanca y con nuestro metodo o terápia sanadora abrirmos en canal a todo el que se pone delante nuestra, ¡Uf! ¡que Inquisición!

Ahora bien, en todo esto hay verdad, que somos pecadores es cierto, que gran parte del dolor y sufrimiento es causado por infringir la ley de Dios también, y que debemos confesar nuestros pecados y arrepentirnos, es asi. Que todos necesitamos recibir cura y restauración en nuestras almas doloridas y dañadas por medio del amor de Dios y la verdad, si. Es interesante observar lo que Dios le dice a Elifaz temanita:

JOB 42:7-9 RVR60 "Y aconteció que después que habló Jehová estas palabras a Job, Jehová dijo a Elifaz temanita: Mi ira se encendió contra ti y tus dos compañeros; porque no habéis hablado de mí lo recto, como mi siervo Job. Ahora, pues, tomaos siete becerros y siete carneros, e id a mi siervo Job, y ofreced holocausto por vosotros, y mi siervo Job orará por vosotros; porque de cierto a él atenderé para no trataros afrentosamente, por cuanto no habéis hablado de mí con rectitud, como mi siervo Job. Fueron, pues, Elifaz temanita, Bildad suhita y Zofar naamatita, e hicieron como Jehová les dijo; y Jehová aceptó la oración de Job." Dios se enojó con los amigos de Job, porque en todos sus discursos y argumentos no hablaron con rectitud de Èl, le presentaron a Job un Dios vengativo y justiciero. Me puedo imaginar a Dios agachando la cabeza cada vez que estos hombres hablaban y moviendola negativamente. El Señor estaría diciendo: ¡estos sabios aun no me conocen!

No habían representado a Dios correctamente, no le habían hecho justicia, hicieron una caricatura y dieron una imagen del Señor desproporcionada y torcida. Ellos dirian: "del lado de Job, no nos vamos a poner, vaya a ser que nos hagamos participe de sus pecados y seamos juzgados con él"

Pero ni siquiera eso esperaba Dios de ellos, ¿entonces qué? solo que amaran y tuvieran compasión. Solo que sufrieran con el que sufre y lloraran con el que lloraba, quizás que oraran por su amigo. Tal vez que estuviesen callados, pero eran muy sabios o a lo mejor se consideraban demasiado inteligentes para tener sus picos cerrados, tenían que hablar, se sentían con esa obligación de decir algo.

"Por tanto, yo hablaba lo que no entendía" Me encantan estas palabras de Job, exhalan humildad, el reconoce su ignorancia.Tristemente es un error muy comun en todos, hablar de lo que no entendemos, explayarnos en infinidad de palabras y elocuentes frases y hacer declaraciones ignorantes especialmente acerca de Dios. Y cuan poco le conocemos; sí hemos oido de Èl, pero solo eso, repetimos como papagayos las escrituras y algunas cosillas que hemos oido de otros.

Job, veía la mano del Señor en todo lo que padecía: "De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven." Ninguna teoría de la vida puede sustituir nuestra mirada de fe al Señor. Porque es así como unicamente podremos verle y conocer que el está obrando en nuestras vidas a través de toda situación.

Seguiremos hablando de lo que no entendemos, parece algo inevitable, pero almenos reconozcamos que no lo sabemos todo como deberíamos, tenemos mucha ignorancia. Quizás así, Dios sea misericordioso con nosotros, y nos proyecte su luz y su verdad, y nos haga conocer cosas que jamás podríamos ni imaginar. Y más que saber o conocer cosas, algo infinitamente mucho mejor, conocerlo a Èl.

2 comentarios:

  1. excelente reflexión, bendiciones.
    mi blog www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com

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  2. Gracias por su comentario Noemi. Miraré su blog. Dios le bendiga.

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